D·N·Angel

Título: D·N·Angel
Autora: Yukiru Sugisaki
Manga: 15 tomos (abierta)
Anime: 26 capítulos (disponible en castellano)
Publicado por: Ivréa (manga) Jonu Media (anime)
Precio: 6.90€ (hasta el 11) 8€ (en adelante)
Sinopsis: En su decimocuarto cumpleaños, Daisuke Niwa es rechazado por su primer amor, Risa Harada. Al regresar a su casa, la cual es un campo de entrenamiento lleno de trampas mortales, siente como otro ADN dormido en su interior trata de controlarlo. Así Daisuke se convierte por primera vez en el legendario ladrón Dark, una entidad que toma los cuerpos de todos los hombres adultos de la familia Niwa. La única forma en que Daisuke puede librarse de este alter ego es encontrando «La Llave». Ayudado por su mascota Wiz, Daisuke deberá emprender un espectacular robo que le permita encontrar esta llave, mientras su enigmático compañero de clase, Hiwatari, trata de capturarlo a toda costa. Pero la llave puede no ser un objeto, sino el amor de una persona…

Opinión: Este manga tiene su aquel, y no solo por lo irregular de su publicación. D·N·Angel fue uno de los primeros mangas que me compré y que más he disfrutado y releído. En primer lugar hay que destacar que el primer tomo salió en 2003 y aún se sigue publicando. Pensaréis: «¿¡pero cuántos tomos tiene esa serie?!» y yo os sorprenderé diciendo que solo cuenta con 15 (de momento, eso sí).

Es una serie abierta cuya publicación ha sido muy, pero que muy irregular, como ya he mencionado antes. Y lo más sorprendente es que la culpa no ha sido de Ivréa, la editorial que lo trae a España, sino de los propios japoneses. La editorial se ha portado muy bien con esta serie, dejando siempre muy poco margen entre las fechas de salida entre Japón y España. Hasta que el manga llegó al tomo 9 no ocurrió nada destacable… Pero después hubo un parón preocupante. Sin embargo, ese hueco lo llenó el anime, que se estrenó en Japón también en 2003. Después, en 2004, nos sorprendieron sacando el tomo 10 cambiando por completo la estética de la «colección» y tornando el canto en rojo, en lugar de blanco, como los otros nueve. Esperando que la publicación volviera a la normalidad, nos dimos cuenta de que tendríamos que esperar otro año más para poder ver el 11, cuyo canto ahora sería naranja. Sin embargo, pasaron los años y la serie parecía olvidada. No había noticias de ella en Japón y corrían rumores de que había sido cancelada. Casi nos olvidamos de ella hasta que tres años después, en 2008, salió el 12 con una tonalidad roja un poco más clara que el 10. Los colores de los cantos ya no era algo que preocupara. ¡Por fin volvía a salir un tomo y podíamos continuar la historia! Al año siguiente salió el 13, pero no fue hasta tres años después, este mismo año, cuando salieron el 14 y el 15. Recibir los dos «juntos» fue algo tan chocante, como si no fuera lo normal, que tardé en asimilarlo. Pero aquí están. Ahora, la gran pregunta es… ¿cuándo saldrá el 16?

Y tras todo este rollo que os he soltado, pero que, en fin, es totalmente remarcable, os introduciré en la historia. Daisuke Niwa es un joven al que bien se lo podría calificar de ingenuo e inocente y esos serían sus rasgos que lo caracterizasen de adorable. También podríamos llamarlo torpe si no fuera porque desde que era un bebé le han entrenado para convertirse en un ladrón. Cada día, a todas horas, su casa se convierte en un campo de entrenamiento cubierto de trampas que deberá superar si quiere salir. ¿Y todo esto por qué? Pues porque los Niwa siempre han sido ladrones, y cuando Daisuke cumple catorce años, el famoso y legendario ladrón Dark despierta en su interior.

Dark, a su vez, es una entidad completamente enigmática, de la cual sabremos cosas muy adelantados en la historia. Lo que una cosa queda clara es que Dark es el otro yo de Daisuke. Dos personalidades diferentes habitan un mismo cuerpo, pero eso no quiere decir que, en el fondo, no sean un mismo ser. Este es un tema complicado que se irá entendiendo conforme se avance en la lectura del manga, pero muy interesante de descubrir. Sin embargo, a Niwa no le hace ninguna gracia la presencia de Dark en su interior, ni que sea incapaz de controlar su cuerpo en determinadas ocasiones, por lo que busca la manera de deshacerse de él (al menos al principio). Y es que Dark se transforma y se apodera de su cuerpo cuando Niwa se excita demasiado y sus emociones se desbordan. Lo mismo ocurre con Dark, así que podrían estar igualados, más o menos. La única manera de librarse de él, es consiguiendo a la doncella sagrada, es decir, una novia. Pero Niwa es muy tímido y cuando se declara a Risa, la chica de la que está enamorado, le rechaza plenamente porque ella busca a un chico como Dark. Mientras tanto, Dark se ha fijado en la hermana gemela de Risa: Riku, que le considera un pervertido, entre otras cosas. Así que así están las cosas; ambos destinados a estar a dos velas… ¿o no?

Hasta ahí se queda lo shoujo del asunto (que, por otra parte, es lo que más se le saca partido en el anime; eso e invenciones con magia), pues queda la otra parte que tiene más importancia en la trama, todo sea dicho. De ahí que a veces me planteara si esta serie era shoujo o qué (pero no porque me importara, que quede claro). Me estoy refiriendo a la parte de los robos y los motivos que hay detrás de estos y de las obras de arte. Además, una de las cosas que más me han llamado la atención es en qué piensan estos japoneses. Es decir, aquí, Dark envía notas avisando qué va a robar y cuándo. En Kamikaze Kaitou Jeanne y en Kaito Kid sucede lo mismo. ¿La educación llega a tal extremo? Llegados a este punto, os daréis cuenta de que falta otro personaje crucial en una historia de ladrones, ¿no? Exacto, la figura del policía. En este caso ese es Satoshi Hiwatari, un compañero de clase de Niwa que sospecha de su verdadera identidad desde el primer momento. Pero Hiwatari es mucho más que el comandante (que encima es quien lidera a la policía y quien crea las estrategias para capturar a Dark); es otro personaje lleno de misterios que hace que se genere esa tensión que te incapacita para dejar de leer. Porque él es más de quien dice ser, es la clave para resolver el enigma, ya que parece tener todas las respuestas (que no te las da hasta el tomo 15, prácticamente, aunque puedes ir intuyéndolo de antes). Así que si Dark tenía misterio para dar y tomar, Hiwatari le sigue muy de cerca. (Aunque si nos paramos a pensarlo, Wiz también es bastante misterioso a la par de monoso. ¿De dónde habrá salido y cómo dura tanto?).

El anime es algo que tratar aparte. Aunque es cierto que, pensándolo en retrospectiva (o, mejor dicho, con la suficiente información para poder entender varias cosas, como lo de Alas negras), cobra más sentido y parece no estar tan alejado ni inventado de lo que es el manga. Sin embargo, tiene cosas que son adaptaciones demasiado libres, como el sellar las obras de arte (que no ocurre tan a lo KKJ en el manga), que Risa sea un as tirando las cartas del tarot, y cambios que surgen en la trama porque sí (la parte de Mio es una completa invención, que quede claro). Los capítulos finales son un apaño a la etapa de Argentine que todavía no existía, ya que, como he explicado antes, el anime se hizo en 2003, cuando ni siquiera teníamos noticias de cómo iba a seguir la serie. Por otra parte, y como queja hacia el anime, el dibujo no tiene ni punto de comparación con el manga, al menos en lo que se refiere a Dark. En el anime no logran capturar su esencia y toda la belleza que le corresponde. Como contrapunto, al menos, cuenta con una maravillosa banda sonora de la cual dos canciones me tienen embelesada hasta hoy en día: Byakuya ~True Light (el opening) y Caged Bird (la canción que suena en el arco de Freedert con el que siempre lloro), ambas canciones de Shunichi Miyamoto, al cual os recomiendo que echéis un vistazo al resto de canciones que tiene, pues son preciosas todas. En resumidas cuentas: el anime está bien (y como siempre el doblaje al español es… especial; solo decir que se le parece mucho al de Fushigi Yugi… y que las voces no pegan para nada), pero el manga está muchísimo mejor. Quitando a un lado toda la irregularidad de salidas (y que la autora ya podría preocuparse un poco más por esta obra antes de empezar o continuar otras más recientes), es un manga que merece mucho la pena. También podemos encontrar un artbook llamado Neutral, que está a la venta en España, y unas novelas basadas en el manga que sacaron en Japón, de las cuales corren rumores de que la editorial piensa traer traducidas, aunque en un futuro. Yo me las compraría, sin duda. Además, Ivréa parece estar apostando por las light novel, así que espero que descubra HakuYou muy pronto para que se dé cuenta del exitazo que podría tener si las trae. ¡Esas sí que de fijo serían mías!

Para acabar, voy a mencionar algo que quizá os sorprenda. A pesar de que el manga consta de momento de quince tomos, solo tiene cinco arcos argumentales que, ciertamente, están perfectamente unidos: Avisos, que  llega hasta el tomo 3 y es una introducción de las aventuras de Daisuke y Dark y cómo roban; Stage 2, que llega hasta el tomo 6 y empieza a narrar cómo las obras de arte tienen vida propia; La segunda mano del tiempo (la de Freedert) comienza en el 6 y acaba en el 9; Stage 3, que comienza nada más acabar la anterior en el mismo tomo y nos va preparando algunos secretos que esconden Dark e Hiwatari, incluyendo la aparición de Argentine, y acaba con un capítulo especial en el tomo 14, en el cual comienza el Stage 4, donde aparece Insomnia y los problemas de corazón de ya podíamos apreciar en los anteriores arcos. También hay capítulo especiales y extras, como por ejemplo One night magic que aparece en el tomo 3 y 4 y son historietas cortas y comentarios de la autora con entrevistas y cosas para los fans.

Impresión general	Puntuaciones
	Personajes: 9.5
	Amor: 8
	Trama: 9
	Dibujo: 10
	Misterio: 9.5