Título: La Corte de los Espejos
Autora: Concepción Perea.
Editorial: Fantascy
Saga: La Corte de los Espejos I (espero)
Páginas: 672
Sinopsis: TerraLinde, un reino donde las hadas no creen que los humanos existan, una vieja ciudad que fue decisiva durante la Guerra de la Reina Durmiente. Han pasado años desde ese cruento conflicto que dejó tras de sí una paz delicada, una larga lista de rencores y un trono inestable.
Allí viven Nicasia, una knocker del gremio de ingenieros, y Dujal, un phoka demasiado aficionado al riesgo. Ambos llevan años enzarzados en un pulso de poder en el que Marsias, un apacible sátiro dueño de un burdel, trata de mediar como puede. El asesinato de Manx, tutora de Dujal y compañera de armas de Marsias y Nicasia, los obligará a unirse para encontrar a los culpables. Juntos emprenderán una investigación que los llevará desde los bosques de los centauros hasta las montañas de TocaEstrellas, habitadas por los feroces goblins. Y siempre perseguidos por la larga sombra de la misteriosa Dama RecorreTúneles.
Opinión: ¿Sabéis esas veces que nos quejamos de que no sucede nada en un libro y que se nos hace lento e interminable? Este no es ese caso. Para nada. Vamos, no hay cosa más distante a este libro que decir «no sucede nada». A cada página, a cada momento hay acción para aburrir. Y no aburre. Pero empecemos por el principio: se trata de un libro sobre el mundo de las faes escrito por una española, Concepción Perea. ¿Recordáis cuando dije en mi reflexión que debíamos dar más oportunidades a la fantasía española? Este libro lo confirma con una potencia indescriptible. Es parte de una saga pero cierra casi todos los hilos que va abriendo con magistral arte, así que, por lo menos, no os quedaréis demasiado mal al terminarlo. Y tardaréis en terminarlo, pero no porque no sucedan cosas o porque se haga lento, sino porque estaréis embelesados con su lenguaje.
La trama… la trama… empieza con un gatito travieso que quiere gastar una jugarreta a una vieja ingeniera. A partir de ahí… digamos que es una trama que va añadiendo pequeños hilos a la madeja conforme avanzan las páginas. Esta es una de las partes más difíciles en esta reseña, ya que se trata de una novela que va añadiendo hilos a una trama inicial haciendo que lo que al principio parecía una trama sencilla, se complique inesperadamente. Y no se trata de una complicación artificial, es decir, no resulta forzada ni molesta, es, más bien, como si tuvieras una saga de estas de cien o doscientas páginas por libro en uno solo. Cosa que hay que agardecer, porque yo he notado más de un punto en el que podían haber cortado el libro y abierto saga. Sin embargo, el final del libro es bastante cerrado, aunque deja uno de los hilos colgando para que queramos saber más del mundo. Y es un final redondo, con fuerza, que consigue que el lector se sienta completamente satisfecho del esfuerzo realizado en mantenerse al tanto de cada uno de los personajes y de cada una de las situaciones.
No se trata, exactamente, de un libro complicado de leer en el sentido de que no te vayas enterando de lo que sucede, pero sí en el sentido de que suceden muchas cosas cada pocas páginas, lo que hace que te parezca que has leído mucho más de lo que has leído realmente. Algo que ayuda a esta sensación es el cambio de personajes a lo largo de un mismo capítulo. Normalmente, cuando hay un cambio de personaje según el capítulo, tienes ese momento de transición mental bien definido que te permite situarte en la posición del otro personaje. En este caso, ese momento es mucho más rápido, puesto que, de una línea a otra, puedes estar cambiando completamente la perspectiva de lo que sabe el personaje o de lo que es capaz de hacer. No es una queja, aunque lo parezca, sino dar motivos por los que, a veces, el lector se siente un tanto perdido. Y, sobre todo, explicar por qué es un libro que hay que leer en pequeños fragmentos, ya que no puedes dejar de lado ni uno solo de los detalles, ya que más adelante cobrarán importancia. Y eso, para mí, es uno de los mejores estilos de literatura.
Si hablamos de los personajes, tengo que decir que me han encantado. Todos sus personajes tienen una personalidad completamente definidia, desde Nicasia, la protagonista casi indiscutible del libro, hasta el inútil que aparece casi al final del libro por primera vez. Así, Nicasia es un personaje adorable precisamente pro lo brusco que es con el resto. Siempre intenta conseguir que todo vaya mejor apra el resto, a pesar de los sacrificios personales que eso le implica. Uno de los detalles que más me ha gustado del libro es cómo vamos descubriendo lentamente las emociones de este personaje junto a su pasado. Y es que hay un detalle interesantísimo: las hadas tienen relaciones sexuales y no solo las tienen, sino que en el libro se marcan claramente, sin entrar nunca en la escena en sí. Y, en un alarde de diversidad, no todas son «macho» «hembra», pero sin ningún desvarío ni haciéndolo como si fuera algo especial, ni nada por el estilo, cosa que se agradece tanto. En serio, en ese sentido es uno de los libros más directos y mejores en el tratamiento de la diversidad. Eso sí, para la cantidad de especies que hay entre las hadas, no puedo dejar de recomendar que, antes de leerlo, le echéis un vistazo a la sección del Doctor de Hadas del blog, puede facilitaros mucho el camino. Porque he echado un poco de menos alguna descripción más clara de las hadas, claro que no tendría sentido, pues los personajes ya saben cuáles son las capacidades de cada tipo. Pero bueno, que me he ido por la tangente. Otro de los grandes personajes es Dujal, el otro coprotagonista. Diré, para Alexia directamente, que es un gato cambiante. Y que es el único que tiene conexión con el mundo humano. Pero, sobre todo, es un gato, tramposo, con un corazón de oro y juguetón. Mete en problemas a todos pero se empeña en salvarlos. Realmente, un personaje que da muchísima fuerza a la historia. Luego está Marsias, un sátiro enorme y protagonista de uno de los momentos más duros del libro. Sin duda, un punto cómo se resuelven las cosas con ese personaje. Y… de nuevo, no quiero decir nada más para no meteros ningún spoiler, pero conoceréis a muchos más personajes interesantísimos a lo largo de las páginas de la novela.
¿He dicho ya que no es un libro sencillo? Bueno, pues eso, pero sí es un libro muy satisfactorio, que recompensa al lector todo el esfuerzo que pone. Eso sí, la forma en que está escrito tiene fragmentos divertidos, hermosos, brutales y, a veces, sencillamente oníricos. Todo esto contribuye a la sensación de alienación al no entender la sociedad que se ha creado ni los motivos de esa creación, pues estaremos leyendo muchas veces acerca de una guerra de la que no hemos sido testigos, y poco a poco, iremos descubriendo de dónde salió esa guerra y el papel de los distintos personajes en la misma. Y todo eso mientras se mueven infinidad de personajes y generan conflictos y nos engañan y se engañan entre ellos. Sin duda, se trata de una novela que reta al lector, pero que, al final, da una serie de satisfacciones al lector que hacen que todo el esfuerzo merezca la pena. Y se puede leer rápido… solo que no creo que en este caso se pueda disfrutar de la misma manera.
En definitiva, un gran libro de fantasía española, con unos personajes que se quedarán indelebles en la memoria del lector y unas aventuras que subirán su tensión. Ha habido veces que me daban ganas de gritar a los personajes, de tan metido que estaba en la historia, así que… leed este libro sin falta. Merece muchísimo la pena. Todo amante de las hadas, faes o bichejos de la mitología feérica debería darle un tiento con ganas a este libro.
Impresión general
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Puntuaciones
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Trama: 9
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Personajes: 10
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Magia: 9
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Estilo: 8
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Sociedad: 10
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Khardan Khardan Khardan… Cada vez que abres la boca o empuñas las teclas mi lista de pendientes aumenta xD
Le tenía ya un ojo echado al libro, pero vamos, que poco más. Además, va de faes, así que otro más para la lista
Por fin he conocido esta historia y me ha gustado bastante. Aunque también es cierto que he visto un par de detalles que quiero comentar:
1. Eso que dices de que pasan cosas cada dos por tres con acción constante lo he visto como si fuera una campaña de rol. Ha habido cosas que no es que sobraran, pero como que se alargaban quizá de más como en una partida donde se te va la olla xD
2. Hay una cosa que se ha repetido y se ha contradicho (si lo he entendido bien) a lo largo del libro. Primero Dujal decía que buscaba que cualquiera respondiera a la canción de sangre, que incluso lo intentó con Marssial. Pero luego al final, con su hermana, dice que es algo que sale del interior, por lo que «no la conocía». El hecho igualmente de repetirlo dos veces me parece innecesario, como si se le hubiera olvidado que lo había mencionado ya ^^u