Los hacedores, capítulo dos parte cinco

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Y nueva ración de los hacedores… aunque un poco tarde T_T

Khardan hizo un gesto hacia el sofá, invitándolas a sentarse en los huecos que Bra había creado. Ellas volvieron a mirarse y, Alexia con un suspiro y Bra con una sonrisa, se sentaron. Mientras Khardan seguía doliéndose de los golpes que le había propinado Alexia, empezaron a hablar. ─Mira ─dijo Alexia ─, para que comprendas por qué hemos tenido que subir por separado, tendremos que empezar por contarte por qué hemos subido a este barco.
Khardan la miró molesto.
─Ya me imagino, si me vais a contar una historia de ciencia ficción tendréis que empezar por el principio.
Alexia le miró con odio reconcentrado. Bra intentó liberar la tensión que se notaba en la sala.
─Bueno, ciencia ficción, ciencia ficción, pues no. Pero un poco fantasiosa probablemente sí te parecerá.
Khardan la miró incrédulo. Alexia le interrumpió antes de que pudiese volver a quejarse
─Todo empezó hace unos meses. Nuestro padre decidió que Bra ya tenía edad para estar casada ─ con un gesto de la mano desechó la protesta indignada de Khardan ─. Ya, ya, yo también creo que ya ha pasado la época de los matrimonios concertados, pero mi padre no es de la misma opinión. El caso es que cuando lo decidió solo había una familia interesada en un matrimonio de conveniencia. Los Sapir. Se dice de ellos que ganaron mucho dinero con operaciones un tanto extrañas, por no decir controvertidas.
─Aham… nunca había oído hablar de ellos ─dijo Khardan, con una sonrisa.
─El caso es que tuvimos que conocerlos. Aunque nuestro padre nos dejó muy claro que no había ninguna otra solución, nosotras decidimos buscar algo que le hiciera cambiar de opinión cuando les conociéramos. No sabíamos lo que nos esperaba.
Un escalofrío completamente visible sacudió a ambas hermanas.
─Vamos, vamos, por muy feos que fueran, no podía ser tan malo ─dijo Khardan con una sonrisa.
─No es que fueran feos. De hecho, tenían un porte tremendamente aristocrático. Pero… ─Las dos hermanas se miran sin saber cómo explicarle lo que sucedió ese día.
Khardan paseó la mirada de una a otra. No entendía qué podía ser tan difícil de creer como para que no se atreviesen a contárselo. Alexia volvió a tomar la palabra.
─Lo cierto es que, a pesar de su porte, sus modales distaban mucho de ser aristocráticos. De hecho, simplemente consideraban a Bra como un bonito jarrón para ser exhibido, mientras que a mí no querían ni tenerme cerca. Según ellos, era demasiado descocada ─ dijo con en un tono que amenazaba tormenta. Justamente como las nubes que empezaban a arremolinarse en el exterior. Aunque ninguno de ellos se fijó en eso.
─Oh. ¿Entonces simplemente os infravaloraban por ser mujeres? ─preguntó Khardan.
─Sí ─respondió Bra ─. Pero… no era simplemente infravalorarnos. No nos consideraban personas. Nuestra visita podría resumirse en “Llegué, vi, comí” aunque lo cierto es que faltaría el verbo salir escopetada.
Alexia miró a Bra sorprendida.
─No creo que eso sea un verbo. Aunque es cierto que nos marchamos con cierta premura. Incluso con una cierta descortesía ─dijo acariciando el zafiro.
Khardan se quedó mirando el zafiro un segundo. Algo no le cuadraba. Cómo podían estar obligadas a casarse si ese zafiro indicaba un nivel social bastante alto. Sin embargo, decidió que no sabía lo suficiente de la clase alta como para pensar que eso era raro.
─En cualquier caso ─dijo Alexia ─, lo cierto es que desde entonces, nos persiguen con la intención de convencernos de volver con ellos. Aunque las primeras veces fueron educados, y simplemente nos lo preguntaron varias veces. Pero… la hermana mayor entró en juego la tercera vez. Esa tercera vez, nos dijo que si no volvíamos en ese momento, conseguirían que los policías nos persiguieran y que nadie quisiera hacer negocios con nosotras. Nuestro padre se había muerto, en extrañas circunstancias, después de la primera vez que les rechazamos.
Khardan volvió a mirar de una a otra, intentando ver si estaban diciendo lo que él creía que estaban diciendo.
─¿Me estáis diciendo que esa gente mató a vuestro padre porque vosotras os escapasteis? ─preguntó anonadado por la simplicidad con la que se lo habían contado.
─En realidad, no lo sabemos, pero es muy raro que justo le cayera un piano encima cuando volvía de llevar la respuesta de Bra ─dijo Alexia.
Khardan se sorprendió ante la forma de decirlo. Ninguna de las dos parecían creer que fuera una coincidencia.
─Ella estaba gritando al oficial el otro día ─dijo Bra a Alexia ─. Si ha conseguido subir, no vamos a estar seguras en ninguna parte.
─¿Quién estaba gritando al oficial? ─preguntó Khardan, curioso.
─Ella. La que nos persigue. Creíamos que al subirnos al barco, nos libraríamos de ella. De hecho, yo fingí que me alejaba de Bra y subía sola al barco para que no intentasen seguirme. Parece que no hemos conseguido librarnos de ella ─dijo Alexia.
─¿Y qué quiere de vosotras, si ya ha quedado claro que no os vais a unir a la familia?
─Parece creer que por cómo huimos somos las elegidas para suceder a la parte matriarcal de su familia. Cosa que nosotras tampoco queremos dado que eso implicaría la boda igualmente. En cualquier caso, es una mujer remarcablemente tozuda. Tenemos motivos para creer que ha sido ella la que ha entrado aquí.
─¿Qué está buscando?
─Lo cierto ─dijo Bra sonrojándose ─es que Alexia se llevó una cosa de su casa, y creo que está intentando recuperarlo. Aunque no sabemos por qué.
─¿Me estás diciendo qué le robasteis algo y os extraña que os persiga? ─preguntó Khardan, prácticamente gritando.
Ambas le hicieron un gesto con el dedo en la boca para que se callase, o por lo menos bajase el tono.
─En realidad no lo robé ─dijo Alexia ─uno de ellos me lo dio como regalo. Y yo decidí quedármelo por las molestias. Según parece era una especie de herencia familiar con un simbolismo mucho mayor.
─Según parece, ni siquiera fue alguien de la familia quien se lo dio. Todos miraban para otro lado cuando les decía el nombre del chico que le había dado el anillo ─dijo Bra.
─Bueno, entonces toda la charada de ser hermanos no tiene ningún sentido, ¿no? Aparte de hacer feliz al guardia que nos dejó entrar ─dijo Khardan.
─No te podemos dejar ayudarnos. Te pones en peligro por nosotras ─dijo Alexia.
─Oh, no te preocupes. No tengo nada mejor que hacer ─respondió Khardan, moviendo la mano quitándole importancia.
─Pero… no sabes de lo que son capaces ─dijo Bra.
─No me importa ─la cortó Khardan ─, si te lo dio como regalo no podía conllevar ninguna responsabilidad. Porque en el momento en que conllevase cualquier responsabilidad ya no sería un regalo. Así que, si yo os puedo ayudar a huir, eso será lo que haga.
Mientras tanto, en otra parte del barco, una mujer vestida de negro, podía ver como dos personas estaban hablando en voz baja mientras preparaban unas flores en un altar de metal oscuro.
Las flores que estaban colocando eran azules. Y el altar estaba decorado con pequeños grabados de delfines y caballitos de mar. Todo parecía indicar que era un antiguo ritual.
Además, dos marineros fornidos estaban tirando herraduras por la borda.
La mujer estaba completamente extrañada. Aún así, hasta que no completase su misión no podía irse de ese barco. Y por tanto, no podía dejar que la descubrieran. Así que, moviéndose sigilosamente, entró de nuevo en el barco, pero antes de eso no pudo evitar escuchar una parte de la conversación.
─¿Estás segura de que son los regalos apropiados? ─preguntaba una voz masculina y profunda. Se le notaba cansado, y un poco incrédulo.
─Sí. Son ellos. Si no les enviamos con ella, naufragaremos ─dijo una voz femenina y autoritaria ─. Una vez les enviemos con ella, no habrá ningún problema ni necesidad de ningún otro sacrificio.
La sombra estaba demasiado concentrada en huir para prestar más atención, aunque le recordaban a algún culto antiguo, del albor del tiempo. Las profecías siempre requieren del sacrificio de alguien, pensó. Su propia misión era el ejemplo perfecto de esa afirmación.

3 pensamientos en “Los hacedores, capítulo dos parte cinco

  1. Alexia Aikawa

    Se te ha colado un presente entre tanto pasado. "Las dos hermanas se miran sin saber cómo explicarle lo que sucedió ese día".

    Y hay que arreglar los guiones, aunque eso es sencillo.

    Sobre la trama… dices que a khardan le resulta raro que hablen así de la muerte de su padre porque no creen que fuera una coincidencia, pero… lo normal es que al contarlo estuvieran mínimamente afectadas. (¿un piano? ¿en serio?)
    Por cierto, ¿y la madre?

    Khardan es demasiado incrédulo… y me da la sensación de que todo sucede muy deprisa (por fin la famosa conversación y ocurre en un tris).

    Ah, ¿y lo de ciencia ficción? ¿se esperaba naves espaciales o es que pensaba que éramos alienígenas?

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  2. Khardan Autor

    Evidentemente, la conversación aún no ha acabado. Simplemente han terminado de tratar un tema.

    Lo de la madre… ya se verá. xDDDD

    Uhm… ciencia ficción es una forma de decir que es increíble (Seriously? no has oído nunca esa expresión? O.o )

    Sep… un piano. ¿Algún problema? ^_^Siempre me ha gustado la Warner xDDDDDDDDDDD

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  3. Bra

    Lo del matrimonio fue lo primero que se me ocurrió cuando buscaba motivos para la huida de Alexia y Bra. Luego lo descarte y pase a lo de ladronas…y creo que ya ahí me perdí xD. Veo que al final no iba tan desencaminada.

    Una preguntita…¿otro que, mientras escribía, vio el anuncio del Nexpreso? xD

    Me encanta la idea de una Alexia descocada, me gusta como se comporta xD.
    Lo que yo diga Bra es un trozo de carne o en todo caso un jarrón xD (eso da miedo…me recuerda a la rubia de la cena *escalofrios*).

    La muerte del padre…de verdad que suena muy a coña xD. Ahora me imagino un padre a los George Clooney (mira tu que guapo).Pero como dice Alexia, ¿y la madre? Supongo que por la manera en que has retratado al padre, la madre- si es que esta viva- ni pincha ni corta en las decisiones que tome su marido.

    Así que la hermana mayor es la que observaba en la piscina, la que pregunto al guardia y, seguramente, la que entro en la habitación.

    Khardan es tan…tan…no se decirlo…mmm, parece que tiene horchata en las venas. Parece que casi nada le sorprende y que le da igual arriesgarse y demás. Dime que encima sabe pelear y ya lo tiene todo xD

    Lo del chico que le regalo el anillo a Alexia…hmmm….hmmm….¿he dicho ya hmmm?

    Las figuras del final. ¿La hermana mayor perseguidora, Daniel y Sofía? ¿Ahora resulta que hay dos facciones que quieren sacrificio?
    Esto se esta volviendo muy chungo…voto por robar una barca y salir escopeteados xD (me da igual si es verbo o no, lo que si se es que seria una acción bastante útil :P)

    Y Alexia, si yo fuera Khardan viendo todo lo que ha visto hasta el momento…ejem, me da a mí que yo si pensaría que eran alienígenas xDD

    P.D: Sigo peleándome con el teclado, así que solo aparecen los acentos que el Word corrige automáticamente o te señala.
    P.D: Creo que por el momento no me dejo nada en el tintero…creo

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