Personaje Épico: Ender Wiggin

El hacedor escuchó hablar de un joven traumatizado por la guerra único en el universo. 

Nombre: Andrew Wiggin
Alias: Ender, Portavoz de los Muertos, Tercero
Sagas: El juego de Ender, Las Sombras, Ender en el Exilio
Creador: Orson Scott Card
Edad: 6 años al principio de la saga.
Descripción Física: Menudo, de tez pálida y cabello moreno. (O rubio según el cómic… aunque yo no lo recuerdo del libro)
Descripción Psicológica: Arrepentido, ganador, eficaz.

Opinión del personaje: Bueno, creo que hay pocos personajes que se merezcan tanto estar en esta sección como Ender. Salvador de tres especies alienígenas, capaz de ser un asesino despiadado.

Orson Scott Card creó prácticamente al mismo tiempo a tres grandes personajes que comenzaban en su tierna infancia una evolución tremendamente compleja: Alvin el Hacedor, Ender el Salvador y el Maestro Cantor el Pacificador. Mientras que los dos primeros se ganaron cada uno una saga salida de sus relatos cortos, Maestro Cantor solo pasó de relato corto a libro único. Pero centrémonos en Ender.

Desde el principio nos queda claro que Ender es un niño con serios problemas de personalidad, debidos claramente a la influencia de sus hermanos Valentine y Peter en su vida. De Valentine sacó su bondad y su búsqueda de lo correcto, de Peter su crueldad, o mejor dicho, su capacidad para hacer lo que es necesario. Porque esa es una de las cosas que aprendemos con Ender, que, muchas veces, lo necesario es una crueldad controlada para permitir a la otra persona crecer.

En el primer libro vivimos el infierno de los niños soldado, porque eso es lo que son, quizá no participan directamente, pero el ambiente en que viven es un ambiente hostil hacia ellos. Esto es aún más cierto en el caso de Ender, en el que descubrimos auténticas dotes de liderazgo, unidas a algunas fallas de comportamiento, como un cierto desorden obsesivo-compulsivo con los juegos y con ganar a los adultos. Aún peor será más adelante, cuando se descubran determinados hechos que harán que Ender no sea sino un ser atormentado por haber tomado inconscientemente y solo movido por la rabia ante la «injusticia» de la «guerra».

A partir de ahí, la personalidad de Ender da un cambio, lógico tras lo que ha pasado, en el que intenta que sea su manera de «arrepentirse», una temática muy común en este autor, del mal que había causado. Más adelante descubrió una manera de arrepentirse de  verdad. Pero antes, en «Ender en el exilio» descubrimos como al principio es incapaz de lidiar con su situación y con la «traición» de la persona en la que había confiado. En ese libro, personalmente, Ender me parece bastante desvirtuado, como ya lo dije en la reseña que hice, pero aún así nos ofrece una bonita perspectiva para comprender el hombre en el que Ender se convertirá.

Pero pasemos a la siguiente ocasión en que nos encontraremos con Ender, ya siglos después de haber rechazado el puesto de gobernador de una colonia y habiendo viajado a cientos de planetas para encontrar la verdad de la vida de las personas con las que se encontraba. A la búsqueda de ciertas condiciones únicas que se tenían que dar en el planeta en el que podría por fin descansar. Ahí empieza la historia de «La Voz de los Muertos». Al encontrarse la especie humana con la segunda especie alienígena de la historia, evidentemente nos acordamos de aquel que hizo de nuestro primer encuentro algo mucho más pasajero, Ender el Xenocida. Y del Portavoz de los Muertos, que nos explicó quienes eran los «otros».

En cualquier caso, viajó allí. Al planeta en el que se encontraba la nueva especie y se relacionó con los humanos de allí. En particular con una familia de genios inadaptados como él mismo. La familia de Novinha. Y aquí es donde Ender se convierte en un personaje épico haciendo algo completamente normal, entrar a formar parte de una familia y conseguir que todos se sientan importantes. Realmente merece la pena intentar alcanzar a comprender su forma de entender la vida.

A partir de ahí, a Card se le va la pinza, qué le vamos a hacer, pero Ender sigue siendo Ender, el único que es capaz de intentar lo imposible porque merece la pena intentarlo sea o no real. El pacificador, el comprensivo, aquel que no tiene que enfrentarse con el universo para salvarlo sino hacer lo correcto. Y que, aún así, sigue teniendo la capacidad de tener la atención puesta en todas y cada una de las partes que componen su vida.

En definitiva, un personaje que merece la pena conocer porque en él se puede ver una auténtica evolución y saber vivir. Su vida es, sin duda, capaz de emocionarnos y horrorizarnos a partes iguales. Vamos, que para mí es un gran personaje, con una gran evolución y una auténtica crítica a los sistemas de educación deshumanizadores que últimamente proliferan en el sistema educativo. Como oí decir a cierto profesor honorífico de la Universidad Politécnica de Madrid: «Vosotros sois herramientas creadas por la Universidad, si no servís a las empresas, la Universidad no funciona». Ender es una herramienta del sistema educativo de la Escuela de Batalla y del ejército. Nos muestra la auténtica importancia de comprender al otro, y de no convertirnos en herramientas.