Escuchó el hacedor hablar de un Ángel de la Noche que se atrevió a dejar el camino amargo por amor.
Título: Al filo de la noche
Autor: Brent Weeks
Editorial: Plaza y Janes
Saga: El Ángel de la Noche II
Sinopsis: Segunda entrega de la aclamada trilogía de fantasía épica «El Ángel de la Noche». El asesino perfecto no tiene nombre, sino mil rostros.
Prosigue la saga fantástica creada por Brent Weeks, auténtico autor revelación del género y todo un descubrimiento para los amantes de las novelas de fantasía épica, que la consideran una de las mejores que se han escrito en los últimos años, por la riqueza y complejidad tanto de la historia como de sus personajes, y el realismo y la crudeza con que están tratados.
Tras El camino de las sombras, que nos introducía en el rico universo mítico y onírico del reino de Cenaria, en la segunda entrega ya se ha consumado la invasión de dicho reino a manos de los ejércitos de Khalidor. La población ha sido sometida, y el único foco de resistencia es el Sa’kagé, la gran organización del hampa. Su única esperanza es convencer a Kylar, el asesino más letal del reino, de que se una a la causa. Pero Kylar ya había decidido abandonar para siempre el reino de las sombras y vivir en paz con su nueva familia.
Opinión: Con este libro me ha pasado algo muy raro. Me ha encantado la historia y los personajes me parecen en este libro incluso mejores que en la primera parte, sobre todo Elene Kylar y el rey dios. Pero me ha costado mucho leerlo. De alguna manera, con tanto cambio de personaje protagonista del capítulo, me perdía un poco. Sin embargo, tengo que decir que eso es más culpa mía y de la época en que me ha dado por leerlo que del libro. De hecho, el libro te mantiene siempre con la necesidad de saber más, de avanzar unos cuantos capítulos más para saber qué va a pasar con ese personaje al que has dejado en una situación precaria.
Claro que eso tiene detractores y fans, porque es un estilo bastante molesto (sobre todo si algún personaje o situación te caen mal) para el lector en algunas ocasiones. Eso sí, tengo que reconocer nuevamente que te mantiene en vilo por completo y, no solo eso, sino que además hace mucho más interesante la lectura.
Si, yo soy un fan de los cliffhanger dramáticos al final de cada capítulo (y eso que creo que este libro se pasa un poco con eso…) Lo cual sin duda ha mejorado si cabe mi opinión de esta saga. Porque sí, el autor se mete en unos berenjenales impresionantes y sin embargo sale, no solo airoso, sino con nota.
Para aquellos que se leyeron la primera parte y están deseando terminarse esta, tengo que decir que es una mejora sustancial en muchos aspectos. Y para aquellos que todavía no se han atrevido a comenzar la saga, no sé a qué están esperando. El final de este libro es tan bueno como el del primero, cierto, hay un pequeñísimo bajón de ritmo hacia la mitad del libro, pero apenas se nota si lo lees de seguido. Si te paras en el primer bajón te perderás una experiencia única, de ese estilo que solo las mejores novelas e historias son capaces de conseguir. Te emocionará, destruirá por completo cada uno de los juicios que habías hecho de inicio, y, cuando creas que ya no te puede sorprender, descubrirás que estás completamente equivocado, que siempre, siempre te puede sorprender.
Acerca de los personajes, pues, como ya he dicho, aunque destacan Kylar, Vi y Garoth Ursuul, lo cierto es que tampoco pueden olvidarse otros personajes como la venerable Ariel o Elene, siempre tan pura. Ciertamente es sorprendente todo lo que pueden evolucionar cada uno de los distintos personajes. Si al comienzo nos parece que Kylar tarda un poco en enterarse de las cosas, luego veremos que Garoth Ursuul es el malo que todos queremos tener como némesis. Es así de simple, hacia mucho, pero mucho, que no me encontraba con un malvado tan bien construido y que te hiciera ver sus motivaciones de una manera tan clara. Es fácil odiarle hasta el momento en que te explica sus motivos y su concepto de moralidad. Entonces simplemente acabas despreciándole. En cuanto a Vi. Qué decir de ella, es una auténtica maravilla como personaje, muchísimo más profunda de los que nos podía haber parecido en el primer libro. Y sin duda mucho más interesante en su interacción con Kylar, por no hablar de sus interacciones con Uly. Porque Uly es otro de esos personajes carismáticos que esperas ver crecer a lo largo de la novela. Y sucede. En serio, si alguien quiere aprender lo que son personajes desarrollados e historias de amor que surgen de algo y son creíbles esta es su saga.
Eso sí, seguimos con el mismo tema de siempre con esta saga (y otras del estilo) básicamente, el lenguaje utilizado es el correcto. ¿Cuál es el tema? Pues que algunos de los personajes son barriobajeros y otros son nobles, y ver los cambios de lenguaje entre unos y otros… pues resulta chocante a veces (y eso que está llevado perfectamente).
En fin, creo que con eso ya he dicho mucho, aunque no lo suficiente, acerca de los personajes. Porque hay cosas que hay que saborear y degustar, y los personajes de esta saga no me cabe la menor duda de que son precisamente eso, personajes que hay que saborear. Vamos, que son uno de los mayores alicientes para esta novela. (Y para la saga al completo).
Una mención particular se merece la forma en la que la magia funciona en esta saga. Nunca te lo explican así que la mayoría de las veces te tienes que conformar con «investigaciones de unos pocos», formas de llamarlo de otros, pero nunca tienes claro cuando es magia realmente. Es más, no le das mayor importancia, es algo que forma parte del universo, pero que no necesita realmente de una gran explicación. Simplemente la disfrutas y haces tus cábalas acerca de cómo funciona realmente.
En cualquier caso, es una de las formas más interesantes que he visto de explicar la magia en un libro (al ladito de la de Brandon Sanderson) y sin duda otro de los grandes alicientes para leer la saga.
Y ahora os preguntaréis, ¿tiene alguna cosa que no sea alicientes para leerla? Pues hombre, son libros relativamente complejos, con muchos recovecos y desde luego no son una «lectura ligera» aunque se lean bastante bien. Tampoco es muy recomendable para aquellos que quieran mundos de color rosa, aquí todo se muestra y todo tiene tonalidades grises.
En cuanto a la trama, pues está perfectamente estructurada, y los cambios de os que he hablado antes de personajes están muy bien llevados, a pesar de que yo me liase un poquillo.
En definitiva, se trata de una muy buena novela, dentro de lo que se está demostrando como una de las grandes sagas de la fantasía actual.
¡Qué reseña!
Quiero leérmelo ya *__*
Lo que pasa es que… el final del Camino de las Sombras me deprimió mucho… ¿En serio no vuelve a salir más ese personaje? T___T
Espero que en este libro haya alguien tan carismático como él que lo sustituya y me haga olvidar su ausencia.
Esta Kylar, que cambia mucho a lo largo de la novela, y Uly que es todo un encanto. Incluso tenemos a Vi que tiene mucho más que decir que en la primera novela. Pero con el carisma de Durzo… la verdad es que no. Aunque ya he dicho, que el carisma del malo es innegable. (De lo mucho que te hace odiarle)
¡Hola!
Si queréis Más allá de las sombras antes de su fecha de salida, hemos hecho otro concursillo… pero hay que haber leído Al filo porque son diez preguntas sobre el libro 🙂
http://brentweeks.megustaescribir.com/2011/01/13/%c2%a1gana-un-ejemplar-de-mas-alla-de-las-sombras/
Pues mira que le iba a bajar nota. Le iba a poner un 9, pero por ese final tan espectacular, que me ha hecho ilusionarme de verdad, hacer que mis ojos hicieran chiribitas, y sonriera como una tonta… le subo al 9.5. Toma ya xDD
A diferencia de Khardan, a mí no me ha costado en absoluto leerlo. Me lo he devorado. El cambio de personajes en cada capítulo era una adicción, porque me decía "venga va, acabo este y lo dejo"… ¡Pero es que el siguiente personaje que aparecía era incluso más interesante que el que acababa de dejar! Y no podía parar…