Escuchó el hacedor cómo se admiraba la gente del uso de la lógica para resolver los asuntos más complejos. Se asombró al reconocer dos de los nombres que escuchó.
Título original: The Adventures of Sherlock Holmes
Autor: Arthur Conan Doyle
Género: Misterio, Relatos, Policíaca
Saga: Sherlock Holmes
Año Copyright: 1892
Sinopsis: Las aventuras de Sherlock Holmes es una recopilación de 1892 de relatos que aparecieron publicados por primera vez, por entregas, en la revista Strand desde julio de 1891 hasta junio de 1892.
Son los primeros relatos cortos del detective Sherlock Holmes, que ya había protagonizado anteriormente algunas novelas.
Opinión: A riesgo de resultar cansino, decir que es importante lo de que se publicaban por entregas. Igual que en muchas otras cosas, cuando algo se publica en un estilo para el que no está pensado, pierde bastante. ¿Por qué pierde? Porque puedes ver perfectamente los cortes donde deberían pasar semanas devanándote los sesos para descubrir qué es lo qeu Holmes sabe que tú no sabes.
En cuanto a las historias en sí, hay algunas muy buenas (la de la liga de los pelirrojos y la aparición de Irene Adler) pero hay otras que son bastante menos interesantes, la del labio torcido por ejemplo. Tengo que reconocer que algunas de las historias simplemente son un monólogo del personaje que expone el problema, para acabar con una alocución de Holmes explicando cómo ha desentrañado todo el misterio. En las ocasiones en las que hay acción, nos viene mostrada en forma de «relato» de Holmes de sus andanzas.
No es un libro de relatos que decepcione, porque el que se lo compra sabe que sería mejor comprarse Estudio en Escarlata o el Club de los Cuatro (creo que se llama así) para conocer a Holmes. Pero no se puede negar la tremenda fuerza del personaje de Holmes (idealizado, eso sí) y es una buena manera de conocer partes más oscuras de la misma sociedad victoriana.
Lo mejor de todo, que cuando Holmes te lo cuenta todo tú te quedas, el escritor ha jugado conmigo, porque no me mostraba todo en las descripciones. Solo me decía que Holmes la miraba con cuidado… lo cual hace que yo busque en alguna parte de mi imaginación que ha podido encontrar él que yo no he visto. También me encanta los diálogos de Holmes con Lestrade.
Y hay un relato en el que el propio Arthur Conan Doyle ataca lo que no era nada más que un entretenimiento para la mayoría, diciendo que eran sensacionalistas… diciendo «triviales puede, sensacionalistas no». Y lo hace con una conversación ente Holmes y Watson de esas que hacen época. Porque sí, hay conversaciones entre los dos que son geniales, aunque muchas veces el pobre Watson no sea más que el biógrafo mudo de Holmes.
En definitiva, altamente recomendado. Eso sí, no os leáis los relatos de un tirón, dejad tiempo entre lectura y lectura, y entre relato y relato y lo disfrutaréis mucho más.
Lo vi en la Feria del Libro, pero no me decidí a comprarlo.
Yo tengo muchas ganas de leerlo, a ver si lo consigo 😉
Saludos,
Lana Drown.