El hacedor escuchó romperse una ola que se llevó consigo un mundo entero. Sonaba a vida.
Título: Nación
Editorial: Timunmas
Autor: Terry Pratchett
Páginas: 453
Sinopsis: El día que el mundo se acaba, Mau está volviendo a casa desde la isla de los Muchachos, habiendo superado el ritual de paso de la adolescencia a la edad adulta. Pero entonces llega la ola, una ola gigantesca que lo destruye todo y trae consigo una goleta, la Sweet Judy, que navegará por la isla y atravesará su jungla. Cuando el barco se estrella, sólo se salva un alma, una chica calzones lejanamente emparentada con la familia real de un lejano país en otro continente. La aldea ha desaparecido, la Nación y todo cuanto Mau conoce y ama ha desaparecido. Ahora sólo quedan él, la chica calzones y una gran cantidad de malentendidos. Juntos deben crear una nueva Nación a partir de los restos. Crear una nueva historia. Inteligente, ingeniosa y repleta de la sátira inimitable de Terry Pratchett, esta es una gran aventura que vuelve el mundo del revés, literalmente.
Opinión: GENIAL . Después de decir la primera palabra que me vino a la cabeza cuando acabé el libro, vamos a desarrollarlo. Primer detalle, el protagonista. O, mejor dicho, los protagonistas. Mau y la joven espectro son dos ejemplos de personajes absolutamente humanos, con todos los pensamientos contradictorios e irreverentes que caracterizan a cualquier persona. Pero no son solo eso, de alguna manera consiguen capturar tu mirada y tu corazón sin necesidad de grandes gestas. Simplemente son el tipo de personajes con los que realmente querrías tener una conversación tranquila.
Son sorprendentes, creativos, geniales, tienen un sentido del humor perfectamente ubicado ante la situación en la que se encuentran, pero, lo que es mejor, ves perfectamente su evolución, y eso que hay saltos temporales. Como historia de amor… es tierna y encantadora, pero sobre todo, es real. En todo momento puedes entenderles por completo. Y, lo mejor, al final comprendes por qué no te cuenta nada acerca de la parte más física de la relación. Aparte de que claro, es Pratchett, y él siempre es irreverente con ese tema, pero nunca tiene ninguna escena «subida de tono» en exceso.
Claro que esos personajes son geniales en parte por los compañeros que se les aparecen. Pilu y Milu son tremendamente interesantes, mientras uno es callado el otro no para de hablar, y a través de Pilu descubrimos mucho de nuestros protagonistas… y de lo que le sucede realmente a alguien que no para de hablar. Pero no es solo eso, descubrimos cosas acerca de la amistad, y de la auténtica fuerza de su mano. De la fuerza de las palabras. Aunque al final siempre sea Mau el que se encargue de conseguir hablar como se tiene que hablar.
Las mujeres, qué decir de la vieja Grugrú o de la abuela de la joven espectro. La abuela es la típica abuela/madre de la alta sociedad victoriana. Siempre preocupándose por el decoro y por su situación social, haciéndoselas pasar canutas al padre y a la niña. Unas escenas geniales son los enfrentamientos entre la abuela y el padre de la joven espectro.
Pero aún hay más personajes, porque los personajes malvados son de los que dan verdadero miedo, como los buenos malvados de verdad, estos no tienen remordimientos ni ningún tipo de compasión. Por supuesto, también tenemos a los personajes excéntricos (humanamente) de Pratchett, todos tan creíbles que simplemente te hacen sonreír. No es algo que se pueda evitar, simplemente lees lo que hacen y lo que dicen y ven lo completamente racional que parece.
Porque eso es algo muy importante de esta novela. Es realista. Sí, Pratchett haciendo realista. O… bueno… digamos que es realista alternativa. Es una realidad alternativa, histórica, de hecho no es tan difícil pensar que estás en el mundo real. Por qué es importante esto, porque ves que todo es perfectamente racional y realista, pero no puedes evitar ver el lado gracioso de todo. Excepto, por supuesto, en las escenas emotivas, que es donde Pratchett da el do de pecho y te hace emocionarte completa e irremisiblemente.
Pero aún podemos decir mucho más, la trama tiene el ritmo perfectamente marcado. No hay ninguna escena que sobre, pero tampoco ninguna que falte. Está lo que tiene que estar para dejar a la comprensión del lector todo lo necesario.
En cuanto a la sociedad creada. Cómo describirla sin explicar que prácticamente es un estudio sociológico y religioso de la creación de una comunidad y de unas creencias. O mejor dicho, de la sepultura de unas creencias, y la creación de una comunidad. Sigue el ritmo más simple de todos que es: Va acogiéndose más gente al gobierno de la Nación. Pero no es una Nación cualquiera, es una Nación cuyos dos primeros exponentes son un joven maldito, endemoniado y una mujer extranjera que no entiende el idioma de los demás. Hablando de comunidades disfuncionales. Pero aún hay más con respecto a la idea religiosa.
En este libro se plantea directamente la pregunta que todos nos hacemos: «¿Dónde está Dios cuando los pobres sufren? ¿Por qué hay sufrimiento en el mundo? ¿Por qué suceden catástrofes?»
Y no las responde, sino que deja a la visión del lector muchas de las cosas más sagradas de las creencias. La gente necesita creer. Es una de las máximas de esta novela. Y necesitan creer para tener esperanza. Solo que los líderes no pueden creer, sino que tienen que saber. Y esa es una de las cosas que les diferencian. Pero también es muy importante la idea de que las creencias en la vida tras la muerte tienen mucha importancia para la comunidad.
Pero no es solo un libro acerca de la comunidad. También es un libro de crecimiento, de cómo un chaval al que solo le importa lo bien que lo pasará en la fiesta que marca su paso de muchacho a hombre, pasa a ser alguien muy distinto, capaz de enfrentarse al mal personificado para salvar su mundo. Y alguien capaz de aceptar que hay un horizonte mucho más amplio que el que puede ver a simple vista.
Algo bastante natural en Pratchett es que los personajes tienen las ideas muy claras, aquí vemos personajes con las ideas menos claras, pero mucho más valientes que en Mundodisco, por ejemplo. Eso sí, una cosa que hay que decir de Pratchett es que la Muerte siempre, siempre es uno de sus mejores personajes para los diálogos, aquí aparece pocas veces, pero cuando aparece te deja completamente asombrado. Por toda la carga de profundidad que tienen sus diálogos.
También habla de multiverso, explicándolo muy concisamente, muy tranquilamente. Como si fuera la idea más normal del universo. Y eso es una de las cosas que le hacen tan especial a este escritor. Te muestra las cosas con una sencillez, pero con una profundidad que hace que quieras más. Y el libro es único, pero yo quiero saber más de otros mundos de ese multiverso Pratchiano.
En definitiva, libro recomendado no, recomendadísimo. Incluso si no te gusta Mundodisco, qué demonios, incluso si no te gusta leer, que alguien te lo lea. Es realmente genial y nadie debería perderse libros como este.
Todavía no me he iniciado con Terry Pratchett, y llevo toda la semana pensando en eso, xD. Quiero probar primero con el libro que tiene con Neil Gaiman, que ya me lo han recomendado muchísimo, y luego seguiré con lo demás.
Me apunto este libro también, que tiene una pinta tremenda!!
Un beso!
Quiero iniciarme con Terry Pratchett T__T
Me apunto este, que me has dejado con las ganas, qué maldad más grande! xDDD
Un beso!
-Da-
¡Buf! Pues yo no te recomiendo que empieces con Buenos Presagios, porque aunque Neil Gaiman y él tienen su cierto parecido satírico… Gaiman es bastante más basto y bruto a la hora de escribir ciertas escenas. En las relaciones sexuales es bastante explícito y en las de violencia bastante gore, así que… no te digo más. Pratchett es mucho más sutil. Con él lo mejor es empezar con El color de la magia para iniciarte de cara a Mundodisco.
La reseña te ha quedado muy guay, khardan, muy completa y muy detallada ^^
Se nota que te ha molado (aunque el hecho de que sea realista ha sido toda una revelación).
Este libro no me llama mucho la atención, la temática no me va, aunque lo mismo pensaba de LJDH y ahora me apasionan, quizás acabe dándole una oportunidad.