Reseña de Placeres Prohibidos, Laurell K. Hamilton

Escuchó el hacedor hablar de un lugar donde todo el mundo tenía los mismos derechos, incluso los que habían muerto.

Título: Placeres Prohibidos
Editorial: Gigamesh
Autor:Laurell K. Hamilton
Páginas:  288
Sinopsis: De complexión menuda y lengua afilada, Anita Blake no es alguien a quien convenga subestimar: levanta muertos para ganarse el sustento, y la policía de San Luis recurre a ella cuando necesita asesoría en casos que involucran lo sobrenatural; está curtida en mil batallas y tiene licencia para matar vampiros. No siente simpatía alguna por ellos, pero contra todo pronóstico, se descubre investigando una serie de asesinatos… precisamente de vampiros.

Opinión: La verdad, no os dejéis llevar por el título. No es una novela romántica, a pesar de que contiene referencias a actos sexuales y en general la ambientación es para mayores de 18 años.
Para hablar de este libro, primero voy a tener en cuenta cómo conocí esta saga. Vi los comics. Me leí los comics. Me mordí las uñas hasta dejar solo muñones para conseguir los siguientes números. Primero porque el dibujo era sumamente atractivo, algo alejado de los cánones americanos, pero aún así alejado del manga. La historia me pareció sublime, aunque echaba en falta poder entrar un poco más dentro del personaje de Anita. Y entonces descubrí que eran libros, y no cómics. Que los cómics eran una adaptación de unas novelas que estaban haciendo furor en el mundo anglosajón desde hacía bastante tiempo.
Muy bien, entonces me decidí a leer estos libros, pero resulta que era complicado conseguirlos, o, mejor dicho, siempre había alguna otra novedad que me llamaba más la atención. Hace un par de semanas, decidí que ya era hora de volver a leer sobre vampiros malvados e interesados, y recordé esta saga. Me decidí a darle una oportunidad, con un cierto miedo acerca de si podría superar el hecho de conocer la historia mediante los cómics.
Lo superé rápidamente. La Anita que me presentaba el libro era aún mejor. En los cómics, parecía siempre muy dura y muy segura de sí misma. En el libro, de una manera más realista, al ser narrado en primera persona, conocemos sus miedos y sus inseguridades. Y sí, esta es una auténtica heroína, de las que superan dificultades y miedos para llevar a término su misión. Pero bueno, pasemos ya al libro.
En el libro, nos encontramos con una historia de novela negra en la que le encargan al personaje principal la resolución de un misterio. Y lo que van haciendo en esta primera historia es presentarnos el mundo en el que se mueve nuestra heroína. Un mundo oscuro, en el que, disputa judicial mediante, los vampiros han conseguido plenos derechos ante la ley, pero siguen siendo criaturas poderosas y, cuando menos, egoístas. Muchos de los vampiros que aparecen muestran una falta de escrúpulos única, de hecho, los únicos que muestran algún escrúpulo son los que llevan poco tiempo convertidos. De esta manera, es muy creíble que nuestra protagonista sea llamada «Ejecutora» porque, como buenos criminales, los vampiros que se saltan las normas especiales para ellos tienen que ser cazados.
Es una protagonista con malformaciones, cicatrices, y no despampanante. Según ella misma admite, y según le demuestran los personajes. No es una Bella con complejo de inferioridad, sino una mujer que conoce cuál es el lugar que quiere ocupar en el mundo y a qué se dedica. Ha habido momentos en los que me he asombrado de sus reacciones, pero por lo general son muy lógicas. Sobre todo porque te las explica hasta el punto mínimo. De esa manera, no te asombra cómo reacciona, sino que puedes empatizar perfectamente con ella. Pero no es el único personaje digno de ser estudiado.
A pesar de no entrar en sus mentes hay al menos tres personajes más que merecen, y mucho, tener una mención especial. El primero de ellos es Jean Claude. Intuyo que al final habrá algo más entre ellos que palabras… en ambos sentidos. También estoy convencido de que a cada libro, su relación se irá estrechando. Pero en este primer libro, vemos a un vampiro encantador, que parece estar del lado de la protagonista… pero del que fácilmente podemos ver un lado egoísta y sin ningún tipo de piedad. Un vampiro con todas las de la ley.
Luego tenemos a Edward. Un humano que nos hace preguntarnos quién es el verdadero monstruo en más de una ocasión. Con la misma capacidad de compasión que cualquiera de los vampiros y lleno de violencia, es uno de los personajes que me han llamado más la atención porque con unas pocas pinceladas nos muestra claramente toda su personalidad, y vemos cuán coherente es con ella. Personalmente, me ha dado bastante miedo en algunas ocasiones.
Y finalmente está Nikolaos. Qué se puede decir de ella sino que es una auténtica vampiresa en el cánon más clásico. Da auténtico miedo en muchas de las ocasiones. Sobre todo porque la imaginación no dejaba de mostrarme lo que Anita decía. Porque esa es una de las mejores cosas de este libro, la descripción de las situaciones y de los personajes es sublime, haciéndote sentirte parte de la historia y pudiendo imaginarte a cada personaje con perfecta claridad.
En cuanto al ritmo… tiene altibajos, pero de alguna manera están perfectamente adecuados para que disfrutes de los momentos de tensión y luego te relajes para que te pille por sorpresa el punto de inflexión. Es totalmente sorprendente cómo se va desarrollando la historia sin dejarte ver claramente hacia donde se dirige hasta casi el final. También es muy interesante cómo Anita descubre partes del mundo al mismo tiempo que el lector y no queda para nada forzado.
Otras veces es Anita la que explica al lector qué es lo que está sucediendo.
Por cierto, sin lugar a dudas, si por algo merece la pena realmente esta novela es por todos, o prácticamente todos, los diálogos en los que participa Anita. Tiene un estilo muy especial de chulería y mala baba que te hace sonreír con expectación cuando habla.

En definitiva, si queréis leer un poco de Fantasía Urbana con vampiros, hombres lobo, zombis y demás criaturas de la noche, disfrutar de una de las mejores protagonistas que veréis y disfrutar de una historia de misterio perfectamente orquestada, esta novela es la vuestra. Eso sí, abstenerse estómagos frágiles o gente a la que le disguste la sangre.