Ruby Sparks

Título: Ruby Sparks
Título original: Ruby Sparks
Directores: Jonathan Dayton, Valerie Faris
Guionista: Zoe Kazan
Actores: Paul Dano, Zoe Kazan
Sinopsis: Los directores de «Little Miss Sunshine» relatan la historia de un escritor que se enamora de uno de sus personajes femeninos. Calvin Weir-Fields (Paul Dano) había sido un niño-prodigio, cuya primera novela había tenido un gran éxito. Pero, desde entonces, sufre un sistemático bloqueo creativo agravado por su deprimente vida amorosa. Finalmente, consigue crear un personaje femenino, Ruby Sparks (Zoe Kazan), que acaba materializándose y compartiendo la vida con él.


Opinión: La verdad es que esta es una película atípica para mí. Sí, sé que cumple muchísimos de los tropos y de los tópicos acerca de este estilo, pero aun así, para mí ha sido una especie de revelación. Normalmente, yo no diría esto, y sé que la película tiene muchos fallos en muchos de sus aspectos, tanto en la trama, como en los personajes, como en el ritmo, pero tiene algo, algo que la convierte en especial. Quizá sea Ruby, quizá sea Calvin, o quizá simplemente sea lo banal que es en la maravillosa historia de amor que cuenta.

No nos engañemos, los personajes son planos, no tienen más que tópicos en sí mismos. Calvin es el típico nerd que busca el control por encima de cualquier otra cosa, que se siente mal por no cumplir las expectativas de la gente y que no es capaz de evitar sentirse defraudado con su propia vida. Sin amigos, sin vida social, sin nada que haga que la vida tenga sentido o importancia. Hasta que llega ella. Ruby. La chica de sus sueños, literalmente. ¿Y qué hace él? Intentar amoldarla a su estrecha y controladora visión del mundo. Evidentemente, esto no puede acabar bien. La chica no puede ser simplemente la musa objetificada sin nada más, y menos un personaje tan dulce y lleno de vida como es Ruby. Lentamente, se van reproduciendo los detalles que muestran a Calvin como el controlador egomaníaco que es. Y con esto no quiero decir que no sientas empatía e incluso compasión hacia él, no. Simplemente que si lo piensas bien, aunque sea muy bonito y romántico que no pueda dormir sin ella, en el fondo es una presión y un control absolutos sobre su vida lo que él desea. Y eso no es sano.

Cuando conocemos a su familia… en fin, entendemos un poco mejor las rarezas de Calvin. No le exime de responsabilidad en ningún caso, y menos cuando conocemos a su exnovia. En general, la imagen que se pinta de los escritores en esta película no es precisamente positiva. Sin embargo, hay muchos detalles, como el punto final que da Calvin, o la forma en que acepta que lo bueno que le pasa no puede ser controlado ni explicado, sino que hay que aceptarlo tal y como viene. En general, para mí, el mensaje trata más de lo que no se debe hacer hacia otra persona que del amor que se profesan Ruby y Calvin. Sobre todo porque si analizamos con cuidado a Calvin vemos que no se trata de un amor real, sino de una extensión de su amor a sí mismo y por tanto de un egoísmo llevado a un grado sumo.

Os recomendaría que vieseis esta película, también, porque rompe con muchas de las estructuras que esperamos encontrar en este estilo de películas, si bien el final está cantadísimo. Eso sí, la circularidad de que hace gala la película es uno de los detalles que me enamoraron de ella, pues genera una sensación agradable en el que la ve, aunque en ningún momento nos da la impresión de estar ante un sueño o una ensoñación de Calvin. Se trata de emplear todos los detalles que siempre nos dicen que pueden ser bonitos, llevarlos al extremo para demostrar que solo cuando tratamos al otro como si fuera una persona real con necesidades y objetivos que pueden ser distintos a los nuestros. «Ruby era simplemente Ruby, en su alegría y en su tristeza»

Impresión general	Puntuaciones
	Personajes: 6
	Actuación: 8
	Trama: 8
	Presentación: 8
	Final: 9