Just Listen

Título: Just Listen
Autora: Sarah Dessen
Editorial: Maeva Young
ISBN: 9788415120889
Páginas: 400
Sinopsis: «Bueno, si te das cuenta, la música une a la gente. Posee una fuerza increíble. Algo que dos personas totalmente distintas en to do lo demás pueden tener en común.»
Cuando una vez más Annabel decide huir en vez de afrontar los problemas, su vida da un cambio radical. Aislada en el colegio y en casa, solo encuentra apoyo en Owen, un compañero de instituto, que tiene por norma decir siempre la verdad, sin importarle las consecuencias. Annabel concierte la música en su vía de escape y trata de encontrar el valor de afrontar lo que de verdad ocurrió la noche en la que Sophie dejó de ser su mejor amiga.

Opinión: ¿Qué puedo decir de este libro? La verdad es que es una auténtica maravilla. Si Una canción para ti ya me gustó, este conserva el mismo estilo y realidad que el otro. Sarah Dessen se está afianzando un hueco entre mis lecturas predilectas por esa forma de escribir y de transmitir. Sus historias son siempre reales y muy personales; siempre consiguen llegar a una parte de mí que nadie consigue tocar. Y eso es un mérito que no puedo dejar de reconocer. Sus personajes siempre tienen un algo que hace que me sienta identificada con ellos, y en este caso sigue siendo así.

El estilo es bastante peculiar. Está narrado en primera persona (el mejor método para acercarnos a la protagonista y ver claramente sus sentimientos y situación), pero no conserva una linealidad temporal en lo que refiere a la narración. Empezamos con la vuelta al instituto tras lo que parece haber sido un verano desastroso, pero no sabemos por qué. Solo que ahora está sola y ha perdido a todas sus amigas, pues la odian, básicamente. Conforme le van sucediendo cosas en el presente, ella se remite al pasado para explicarnos a nosotros por qué reacciona así, y aunque parezca un poco complejo, en realidad le coges el punto con bastante facilidad. Por supuesto, llega un momento dado en el que tienes, más o menos, toda la información que necesitas para estabilizarte y quedarte en el presente viendo cómo avanza la historia y la vida de Annabel, que no es tan simple ni sencilla como muchos puedan imaginar. Sin embargo, hay cosas que no están del todo claras y volveremos a mantener estos viajes que amenizan tanto la historia y que te esclarecen de una forma bastante interesante todo lo que ha pasado. Esos saltos que causan un equilibrio en el ritmo y en la historia acorde a cómo se siente la protagonista en cada momento.

Mientras leía no podía evitar hacer al principio algunas comparaciones entre los dos libros de la autora que ha publicado Maeva Young. En ambos, las protagonistas son adolescentes que parece que hayan tenido una vida fácil, pero que, en el fondo, sus familias son un pequeño caos que influye en sus vidas más de lo que podría parecer. También está el tema de la música, claro, un tema en común que comparten ambos libros, pero que cobra aún más importancia en este (incluso hay un cameo donde aparecen Remy y Dexter, detalle que me hizo mucha gracia). El título y la frase que lo acompaña es francamente genial, y me ha sorprendido saber que está sacada tal cual de un diálogo que ocurre en Just Listen. Pero, a diferencia de Una canción para ti, en este, aunque la madre sea también objeto central de algunos problemas de Annabel, no tiene absolutamente nada que ver. Pero lo que está claro es que las chicas reaccionan de una manera parecida; quieren a sus madres y harán todo lo que sea para que sean felices, aunque eso signifique amargarse un poco ellas mismas.

Annabel es modelo desde que tenía meses. Sus dos hermanas también lo fueron, y era algo así como una tradición familiar. Sin embargo, tanto Whitney como Kirsten dejaron el modelaje al ser mayor de edad y ahora solo queda ella, la pequeña, y la única ilusión de su madre. Pero ella está harta de todo ese mundo, y no sabe cómo salir de él sin hacer daño a quienes la rodean. No se le dan bien las confrontaciones, por eso siempre es la niña buena, la que tiene que hacer lo que todos esperan de ella y nunca, nunca, rebelarse ni enfadarse. Años de ser así la convierten en lo que es ahora: una experta en mentiras piadosas y en guardarse todo lo negativo en su interior. Pero eso cambiará en cuanto conozca al chico más sincero y honesto de la historia, cuyo lema es sacar todo lo que lleves dentro, sea cual sea la circunstancia y consecuencia, pues si temes que el otro se enfade, no lo hagas porque es normal que el ser humano sienta enfado. Al principio, la relación entre los dos es inexistente, pero poco a poco encuentran excusas para conocerse mejor y charlar. La música les une, o eso parece, aunque no tengan ningún gusto musical en común.

Esta es la historia de Annabel, por supuesto, pero no se queda solo en ella. También es la historia de sus hermanas, de Emily, de Clarke… Es un libro muy completo que cubre todos los campos de una manera excepcional. Y es un libro muy individual, y personal, donde te enseña que no necesitas a nadie, y menos a un caballero de brillante armadura, para ser rescatada. Por eso tal vez, aunque la presencia de Owen es muy bien recibida, no es imprescindible. Es una novela muy realista y verosímil donde todos los personajes tienen su razón de ser y su personalidad e incluso su propia historia que no queda relegada a un segundo plano. Una historia donde el mensajes es bastante claro: No pienses, ni juzgues; solo escucha lo que tengo que decir. Y eso es lo que ofrece el libro: una historia para que tú la escuches, asimiles y comprendas, sin forjarte prejuicios ni falsas ideas preconcebidas sobre una persona y/o situación.

Impresión general	Puntuaciones
	Personajes: 9
	Verosimilitud: 9.25
	Trama: 9
	Relación: 9
	Estilo: 9.25