Play

Título: Play
Autor: Javier Ruescas
Saga: Play I
Editorial: Montena
Páginas: 512
Sinopsis: El amor es la meta… La fama, su único camino.
Nadie diría que Leo y Aarón son hermanos. El primero es presumido y ambicioso; el segundo, tímido y reservado. Pero ambos desean algo. Mientras Leo sueña con hacerse famoso a toda costa, Aarón no deja de pensar en cómo puede recuperar a su novia, quien, tras ganar un concurso y convertirse en una estrella mundial, se ha vuelto inaccesible.
Un día, husmeando en el ordenador de su hermano, Leo descubre que Aarón tiene un talento desbordante para la música, y que ha compuesto y grabado varios temas que no tienen nada que envidiarles a los hits más populares del momento. Sin meditar las consecuencias, Leo decide darlos a conocer por internet y muy pronto el fenómeno Play Serafin –el nombre que le ha puesto al canal de YouTube– estalla por toda la red…

Opinión: No puedo engañaros, me hizo mucha ilusión recibir la galerada de este título. A pesar del mal sabor de boca que tuve con Tempus Fugit, sabía que todo autor se merece al menos una segunda oportunidad. Javier Ruescas consigue aprovechar por completo esa segunda oportunidad con este libro. Se trata de un libro realista, alejado de tramas fantásticas, aunque sí un tanto fantasiosa. El libro se compone de capítulos alternos entre Aarón y Leonardo, siendo ambos hermanos, como bien muestran las cuentas de twitter de los Serafin. Eso sí, ya van varios libros de temática realista seguidos que leo, lo que quizás haya conseguido que me acerque con mejor talante a este libro. Si bien es cierto que Abrázame Fuerte supuso una decepción completa, esperaba que la obra de Ruescas se acercase más a Hilos, sobre todo en su trato de la trama. De hecho, consigue superarlo ampliamente, tanto en su trama como en sus personajes, de un calado muy distinto.

Los personajes principales de la obra son dos hermanos, Aarón y Leonardo, que han vivido de una manera muy distinta los dos últimos años. Por un lado está Aarón que ha descubierto la miel del amor a manos de Dalila… para encontrarse al volver de vacaciones con que ella ni siquiera da indicios de reconocer su existencia al volverse una estrella de Hollywood. Por el otro, Leonardo ha vivido la vida bohemia y difícil, aunque no tan difícil como descubriremos después, del joven que se va de casa para no seguir los deseos paternos en cuanto a los estudios para convertirse en artista. Entonces, cuando Aarón vuelve de las vacaciones en casa de sus abuelos, se encuentra de sopetón con que Leonardo ha decidido volver a casa y su novia se ha ido a ser una estrella de la nueva película con reminiscencias de Harry Potter o Crepúsculo. Ellos dos nos irán contando su historia de manera alterna, y será una historia de las que hacen soñar, y tener pesadillas. Podremos ver una evolución en ambos que, sin lugar a dudas, hará que podamos empatizar con ellos en todos los aspectos. También descubriremos lo fuertes que pueden ser los lazos familiares, así como a los verdaderos amigos. Pero no todo podía ser bonito, y es que pronto una empresa empezará a mostrarnos la cara más dura de la vida que eligen los hermanos. Y es que Develstar se convertirá casi por derecho propio en la muestra más clara de lo horrible que tienen las empresas de imagen. Están compuestas de gente que probablemente sea buena, como Emma, Hermann o el maestro Haru, una de las grandes sorpresas de la novela, y referencia inequívoca a Karate Kid desde mi punto de vista, pero las dirigen auténticas arpías como la señora Cohen. Es muy interesante ver cómo la parte romántica de los personajes resulta completamente verosímil. Nada se acelera, todo va al ritmo más correcto, pero sin ninguna pausa. Todos y cada uno de los personajes resultan completamente verosímiles en sus reacciones.

La trama, por otro lado, no podía ser más creíble. Y al mismo tiempo increíble. Es una de esas tramas en las que ves que sí, que es posible, pero también es condenadamente difícil que todo salga bien. Hay detalles muy especiales a lo largo de la trama, con guiños a los lectores, como menciones a Harry Potter o a otras obras de la literatura juvenil, o no tan juvenil, como puede ser El juego de Ender, que consiguen que el lector pueda empatizar aún más con las situaciones vividas. Ciertamente, el ritmo es quizá un poco acelerado, y hubiera estado mejor si el camino a la fama hubiera sido un poco más largo… pero todos conocemos ejemplos de situaciones en que eso no se ha dado, sino que se ha acelerado, muchas veces artificialmente un producto juvenil. Es interesante ver cómo es precisamente la relación entre los dos hermanos lo que va marcando el ritmo de la narración, y cómo consigue mantenernos pegados con ambos y no que uno sea mucho más interesante que el otro. Tengo que reconocer que las subtramas de Aarón me parecían más interesantes que las de Leo, probablemente porque este último consiguió desesperarme en varias ocasiones. Pero es la unión de las subtramas de los dos lo que realmente llama la atención, porque están perfectamente imbricadas. No se trata de una trama especialmente original, no lo requiere tampoco puesto que busca darle la vuelta a muchas de las ideas preconcebidas que se tienen. Pero da el aspecto de algo un poco visto en algunos momentos. La típica situación que sabes que has visto otras veces, y no te importa porque está muy bien llevada.

El estilo es ligero, ameno. Las descripciones son interesantes, aunque personalmente me han faltado unas cuantas para poder saber exactamente dónde se encontraban los personajes en algunos momentos. La narración, casi impecable, pues hay algún que otro bloqueo de ritmo que queda un tanto forzado. Los diálogos, sin embargo, son verosímiles y atrayentes. Además, muchas de las acciones están muy bien narradas. Quizá hay alguna que resulta un poco extraña, pero la gran mayoría transportan al lector al centro de la acción. El vocabulario utilizado es muy adecuado, a mi entender, y tiene una cercanía con los lectores que representa al mismo tiempo la cercanía de los personajes. Mención aparte merece el juego de palabras que, sin querer por parte del autor se crea en la palabra Develstar. El ritmo de la narración está muy bien llevado, con sus puntos álgidos y sus descansos situados en los mejores momentos. Quizá una de las cosas que se podrían recriminar es el punto de separación entre la primera y la segunda parte, es decir, el final de este libro, que no se siente como un cliffhanger suficientemente fuerte. Esto tiene su punto positivo, pero personalmente creo que las sagas necesitan esa sensación que te deja con el estómago encogido hasta poder continuar la historia.

En definitiva, una gran apuesta por la literatura juvenil realista, que ha salido muy bien. Tiene algún que otro punto flaco, pero tanto la historia como los personajes lo compensan sin grandes dificultades. El hecho de que sea una trilogía puede echarnos para atrás a muchos posibles lectores, pero esta primera parte se merece sin duda un voto de confianza. Se nota además una evolución muy positiva en el estilo de escritura del autor.

Impresión general	Puntuaciones
	Trama: 8
	Personajes: 9
	Estilo: 8
	Originalidad: 7
	Verosimilitud: 7